¿Y tú para cuando?

Esta es la típica frase que he escuchado en muchísimas ocasiones, de amigos, de conocidos, de desconocidos... y la que siempre que la dicen mi mente y mi mirada les fulmina.

Muchas veces la gente se cree en su derecho de opinar sin preocuparse de lo que pueda sentir la otra persona. Hace unos días hablaba en este post, sobre lo que la gente cree que implica ser madre de dos peques. Y hoy vuelvo a plantear y ha decir, que antes de hablar, pensemos y nos pongamos en el lugar de la otra persona.





Según esta sociedad en la que vivimos, si llevas X años de noviazgo con tu pareja, te tienes que casar, si ya te has casado, tienes que tener hijos... y siempre es la misma pregunta ¿y tú para cuando....? La respuesta, para cuando nos de la gana! Qué ley obliga a casarse cuando llevas X años de noviazgo, o a tener hijos, o a adoptar una mascota. Dejemos que cada uno haga con su vida lo que quiera, si se quiere casar, que se case. Si quiere tener hijos, que los tenga, los adopte o haga lo que quiera.

Siempre nos sueltan la pregunta, pero alguien realmente se ha planteado, si esa pareja que no tiene hijos es porque no quiere, o porque no puede. Si no quiere es su elección, igual que tu decides o no estar con alguien, decides si quieres o no tener hijos y nadie ha de poner en duda tu decisión. Pero lo peor es, si realmente quieres tener hijos, y por cuestiones fisiológicas no puedes. ¿Quién se pone en el lugar de esa persona que desea tener hijos y por mas opciones no es posible? Pues yo lo hago, pero no todo el mundo. Y os digo, es muy cruel, estar constantemente preguntando ¿Y tú para cuando? si llevas años intentando y no ves los resultados.



Cuando no eres capaz de conseguir tus objetivos, lloras, te frustras, maldices a la vida y te dan ganas de mandar a paseo al tipic@ que te hace la fantástica preguntita. Y decirle como dijo en su día la Panto, "¿porqué no te compras una vida? y me dejas vivir la mía tranquila".

Por eso insisto y digo que antes de hablar, nos pongamos en el lugar de la otra persona y pensemos... puede que no quiera tener hijos, o puede que no sea el momento, o puede que no los pueda tener. Y reflexionemos si a nosotros nos gustaría sufrir ese acoso y derribo por parte de la sociedad que nos rodea.

Y a tí, ¿Te ha pasado alguna vez algo asi? Cuéntamelo en los comentarios.

¡Nos leemos prontito!!



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